Comienza la aventura

*por fin veo el mundo exterior tras haber permanecido en la ciudad estos ultimos años, tras salir de los muros, lo primero que hago es ver un mapa*

-¿Y si voy por aqui?.....no, muy siniestro ¿Y si voy a ese otro sitio?......no tiene buena pinta..... *pienso en alto*

Me toco con alguien que estaba algo confuso. Al parecer era una chica.
-¿Qué te pasa?

*al oir aquella voz, pego un grito y se me cae el mapa de las manos. Dejo los brazos en alto*

-¿Q...qu.....qu....que.....quieres?

Enarco una ceja.
-¿Estas perdida? -No hice caso a su pregunta.

*rapidamente tomo una nueva posicion para tratar de aparentar seguridad*

-¡Soy una nueva aventurera! no me preocupa el perderme, estoy preparada *digo firme, aunque el temblor en las piernas y las lagrimas en los ojos me delataban*

Enarco una ceja, divertido.
-Ya veo, ya. -Suelto una carcajada. -¿Y a dónde vas, pequeña?

-voy a explorar el mundo que me rodea.... con suerte podre vivir alguna aventura *digo mientras fuerzo a mis piernas a no temblar*

Asiento levemente.
-Ya veo... Una duda sin importancia... ¿Por qué me temes?

-acabo de empezar a viajar, tengo los nervios a flor de piel *me arrodillo y recojo el mapa*

Suspiro.
-Eres rara.

-solo soy yo *voy enrollando el mapa y me pongo a caminar*

Me acerco a ella. Tenía intriga de saber a donde queria ir.
-¿Qué buscas?

-si te soy sincera no lo se....supongo que atravesare toda Gaia *miro para decidirme sobre que camino tomare*

-no lo se.....simplemente quiero hacer eso cueste lo que cueste

Empiezo a reir.
-Tienes el aire aventurero.

-Debe ser *sonrei y segui para adelante*

Ladeo la cabeza.
-¿Cuál es tu objetivo?

-eeeemmmmm *saco el mapa consultando a donde queria ir y señalo el lugar con el dedo* quiero llegar hasta alli, dicen que alli se encuentra una rosa que ha marcado la historia

Me la quedo mirando, atónito.
-¿¡Quieres ir allí!? ¿A la rosa de los vientos?

-Asi es, debe de ser hermosa *digo animada*

Empiezo a reirme sin poder evitarlo.
-Estás loca.

-¡Ey! ¡¿Tu de que te ries?! *digo enfadandome y tirando el mapa por los suelos*

Me arrodillo, riendo.
-A ver, pequeña. Ese sitio aparte de sagrado es peligroso.

-¡Me da igual! voy armada *digo mostrando mi daga*